Desde su creación en 2005, los Activistas Internacionales por un Microbicida Rectal (IRMA) han tenido un crecimiento y un éxito significativo. A partir de un número de miembros que podía contarse con los dedos de una mano, IRMA ha construido una red de más de 500 activistas, investigadores y personas que redactan las políticas en más de 40 paises de los 5 continentes.

El objetivo de IRMA-ALC es trabajar en conjunto con IRMA, pero con el propósito específico de difundir información sobre los Microbicidas Rectales en nuestra parte del mundo, y, siempre que sea posible, en castellano y en otros idiomas regionales.

martes, 27 de abril de 2010

La vacuna contra el neumococo ofrece protección a los adultos africanos con VIH y un bajo recuento de CD4

Un ensayo clínico en el que se probaba una vacuna contra un patógeno que constituye una las principales causas de neumonía y meningitis ha evidenciado que puede prevenir tres de cada cuatro casos de reinfección en adultos con VIH en África.

El estudio, llevado a cabo en Malaui y financiado por Wellcome Trust, examinó la eficacia de una vacuna contra la infección por la bacteria Streptococcus pneumoniae.

Estas bacterias suponen una causa importante de neumonía y, cuando invaden el torrente sanguíneo y el cerebro (lo que se conoce como enfermedad neumocócica invasiva [ENI]), provocan enfermedades graves -y con frecuencia mortales-, como la septicemia y la meningitis. Entre los adultos con VIH, en particular en el África subsahariana, el riesgo de desarrollar la enfermedad neumocócica invasiva es entre 30 y 100 veces mayor.

La vacuna antineumocócica de polisacáridos (utilizada actualmente para proteger a los adultos en el Reino Unido y EE UU) ha demostrado tener una eficacia limitada en
pacientes adultos con VIH y su uso no está recomendado en África.

Las vacunas de polisacáridos consisten en largas cadenas de moléculas de azúcares aisladas del agente infeccioso (en este caso, la bacteria neumocócica). A fin de mejorar la capacidad de la vacuna para inducir una inmunidad protectora, las moléculas de azúcar se pueden enlazar a una proteína "transportadora", consiguiendo así un aumento de la respuesta inmunitaria frente al antígeno. Esas vacunas son conocidas como "vacunas conjugadas".

Un equipo de investigadores del Programa de Investigación Clínica Malaui-Liverpool-Wellcome Trust, de la Facultad de Medicina en Blantyre (Universidad de Malaui), ha puesto a prueba la eficacia de Prevnar® -una vacuna antineumocócica conjugada desarrollada por la compañía farmacéutica Wyeth- en un ensayo de eficacia clínica de distribución aleatoria, a doble ciego y controlado con placebo.

El estudio, dirigido por el doctor Neil French, antiguo miembro de la Facultad de Medicina Tropical de Liverpool (Reino Unido), probó la vacuna en casi 500 pacientes adultos predominantemente infectados por VIH, que se recuperaban de un caso de ENI después de haber sido admitidos en el Hospital Central Queen Elizabeth de Blantyre. Se comprobó que la vacuna previno el 74% de los casos de enfermedad neumocócica invasiva recurrente en pacientes con una infección subyacente por VIH.

"Se trata del primer ensayo en emplear una vacuna neumocócica conjugada en un grupo compuesto por adultos y que descubre beneficios clínicos", explica el doctor French, que hoy día trabaja en la Facultad de Higiene y Medicina Tropical de Londres.

Resulta especialmente importante destacar el hecho de que la vacuna previno la enfermedad incluso en los casos en que fue administrada a pacientes con recuentos de CD4 inferiores a 200 células/mm3. Las células CD4 constituyen una parte esencial del sistema inmunitario, pero son el blanco del VIH y son destruidas por este virus. Se considera que una persona con VIH y un recuento de CD4 por debajo de 200 células/mm3 tiene sida. Ésta es la primera vez que una vacuna conjugada ha mostrado eficacia en la inducción de una respuesta protectora cuando el recuento de CD4 es bajo.

"Es notable la eficacia de la vacuna para recuentos de CD4 bajos", declara el doctor French. "La opinión general respecto al uso de cualquier tipo de vacuna cuando hay infección por VIH es que se ve inutilizada si el nivel de CD4 es reducido. Hemos demostrado que la tecnología conjugada permite superar la inmunodeficiencia profunda para estos recuentos bajos. Esto supone un hálito de esperanza para el posible empleo de la tecnología conjugada en otras vacunas frente a otras infecciones bacterianas relacionas con el VIH, sobre todo la salmonela no tifoidea.

El doctor French considera que el estudio sugiere la posibilidad de que la vacuna neumocócica conjugada pueda ser aplicable en otros grupos de adultos en situación de riesgo de padecer ENI.

"Dado que [la vacuna] funciona en pacientes con VIH, por extensión, es probable que también sea eficaz en otros grupos de adultos, incluyendo ancianos y otras poblaciones en situación de riesgo", dice. "Se trata de un hallazgo importante que viene a respaldar el desarrollo y uso de vacunas conjugadas entre los adultos en general".
Sin embargo, según el doctor, el precio de las vacunas conjugadas (en torno a 40 dólares por dosis) significa que será preciso contar con mecanismos de financiación similares a los disponibles para las vacunas pediátricas a través de la Iniciativa Mundial para el Acceso a las Vacunas -o de otras formas de subvención-, con el fin de conseguir que estas vacunas gocen de una amplia difusión entre las poblaciones de adultos en África.

Fuente: Comunicado de prensa de Wellcome Trust. 

lunes, 26 de abril de 2010

El Departamento de Salud de Nueva York resalta los riesgos de salud del sexo anal sin protección entre las mujeres heterosexuales en la Ciudad de Nueva York

Una nueva encuesta sugiere que las mujeres son menos propensas que los hombres a usar protección durante relaciones sexuales anales  21 de abril de 2010 – 

El sexo anal sin protección representa peligros de salud muy conocidos para los hombres, pero un nuevo estudio sugiere que la práctica también es un problema de salud significativo para las mujeres.  Según un nuevo informe del Departamento de Salud, cada año más de 100,000 mujeres de la Ciudad de Nueva York tienen relaciones sexuales anales, y muchas no están dando los pasos necesarios para prevenir el VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS).

Las membranas anales se lastiman fácilmente durante el sexo, atribuyendo a la propagación de infección.  Estudios anteriores indican que la exposición anal al VIH presenta 30 veces más riesgo que la exposición vaginal.  Pero los hallazgos de la Ciudad de Nueva York sugieren que las mujeres son menos propensas que los hombres que tienen sexo con hombres a usar condones durante el sexo anal.  Esta cifra sólo es el 23%, según el nuevo informe, comparado al 61% entre los hombres que tienen sexo con otros hombres.  El informe completo está disponible en nyc.gov/health.“Decenas de miles de neoyorquinos están siguiendo una conducta sexual que es especialmente peligrosa dijo el Dr. Thomas Farley, comisionado del Departamento.

“Muchas personas conocen el riesgo del VIH cuando los hombres tienen sexo con otros hombres, pero este informe muestra que un gran número de mujeres también están poniéndose en riesgo al tener sexo anal sin protección.  Para hombres y mujeres, el mensaje en general es claro: Nunca tenga sexo anal sin protección.  Use un condón cada vez”. Así como los condones son especialmente importantes para las personas que tienen sexo anal, igual es la prueba del VIH.  Sin embargo el nuevo informe halla que las mujeres que tienen sexo anal sin protección tienen tasas de pruebas menores que las mujeres que siempre usan un condón durante el sexo anal – 35% versus 63%, respectivamente.  De igual manera, las mujeres que tienen sexo anal sin protección fueron menos probables de reportar que un proveedor de atención médica les haya ofrecido una prueba del VIH durante el año pasado.  Sólo el 11% de las mujeres de mayor riesgo (versus 47% de las que usan condones) dijeron que un proveedor de atención médica les había recomendado hacerse la prueba el año pasado – pese a que un 94% de ellas habían visto a uno. El informe no estima la dimensión del VIH entre las mujeres que tienen sexo anal sin protección, pero la mayoría de las infecciones de VIH diagnosticadas en mujeres son producto de relaciones heterosexuales. En la Ciudad de Nueva York entre las mujeres con fuentes conocidas de exposición, el contacto heterosexual representó el 90% de las infecciones diagnosticadas en 2008.

El sexo anal sin protección es más común entre mujeres más jóvenes y aquellas con parejas múltiples. Las mujeres de 18 a 24 años de edad tienen casi seis veces más probabilidad que las mujeres de 45 a 64 de reportar el sexo anal sin protección (11% versus 2%).  En tanto que el 15% de mujeres con tres o más parejas sexuales reportan la práctica del sexo anal durante el año pasado, la cifra fue de sólo el 4% entre las mujeres con una sola pareja.  Los reportes de sexo anal en el último año son similares entre las razas y los grupos étnicos, con 8% en las mujeres asiáticas, 7% en las mujeres blancas, 6% en las mujeres hispanas y 4% en las mujeres negras.

Recomendaciones para reducir las infecciones de transmisión sexualEl nuevo informe destaca la importancia del sexo seguro en una ciudad donde cada año se reportan casi 74,000 infecciones de transmisión sexual, junto con 3,800 diagnósticos de VIH nuevos.  Algunas recomendaciones:Los proveedores de atención médica deben ofrecer pruebas para el VIH y las ITS a todos los pacientes, sin importar su historial sexual declarado. Las personas que tienen sexo anal siempre deben usar condones.  

En toda la Ciudad de Nueva York hay disponibles gratis los condones NYC Condoms y otras alternativas de condones masculinos, además de condones femeninos y lubricantes.  Para más información llame al 311 o visite nyc.gov/condoms. A menos que estén en relaciones mutualmente monógamas, las personas que tengan sexo sin protección deben hacerse la prueba del VIH y otras ITS por lo menos una vez al año.  Hay disponible pruebas confidenciales, gratis en las clínicas del Departamento de Salud, no se necesita una cita.  

miércoles, 21 de abril de 2010

Un antibiótico económico reduce a la mitad el riesgo de muerte en los primeros 18 meses de tratamiento anti-VIH

El uso de cotrimoxazol, un antibiótico barato y fácilmente disponible, redujo la tasa de mortalidad a la mitad en las primeras 72 semanas de terapia antirretroviral en más de 3.000 pacientes con VIH sintomáticos y con un nivel grave de inmunodepresión en Uganda y Zimbabue, según informó Sarah Walker y un equipo de colaboradores tras el análisis de los datos del ensayo DART, recogido en la edición digital del 29 de marzo de The Lancet.



Durante las primeras 72 semanas tras el inicio de la terapia antirretroviral (TARV), la administración de cotrimoxazol redujo el riesgo de muerte en un 56% (intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 0,37 - 0,86; p= 0,02). Su uso contribuyó también a disminuir en un 26% el riesgo de que se produjera un primer episodio de malaria.



El cotrimoxazol se utiliza en entornos con pocos recursos para tratar y prevenir las infecciones adquiridas en la comunidad y se sabe que resulta eficaz frente a diversas infecciones relacionadas con el VIH, incluyendo la neumonía por Pneumocystis jirovecii o la infección por Toxoplasma gondii.



A raíz de los resultados de estudios realizados en EE UU, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el empleo de la profilaxis con cotrimoxazol para tratar a todos los adultos sintomáticos con recuentos de CD4 inferiores a 350 células/mm3 en entornos con pocos recursos.



No obstante, existen grandes variaciones entre los países en cuanto a la disponibilidad y uso de esta profilaxis. Los principales motivos son la preocupación acerca de sus beneficios y la toxicidad cuando se utiliza junto con antirretrovirales, así como las incertidumbres relativas a la adhesión. Sin embargo, se dispone de datos escasos, cuando existen, que respalden estas preocupaciones.



Hay estudios que han puesto de manifiesto que los pacientes que inician la terapia antirretroviral en el África subsahariana presentan una elevada tasa de muerte, que varía entre el 8 y el 25%, y que la mayoría de los fallecimientos se producen entre los primeros tres y seis meses. Esta alta tasa de mortalidad temprana es consecuencia de la grave inmunodepresión que muestran las personas que inician la TARV. En los primeros meses de tratamiento, los pacientes pueden morir debido a infecciones oportunistas ya existentes o contraer nuevas enfermedades.



El diagnóstico tardío de la infección por VIH y el comienzo con mucho retraso de la terapia implican que muchas personas con el virus no reciben la profilaxis con cotrimoxazol antes de empezar la TARV.



De todos modos, el empleo de este antibiótico puede tener un efecto protector frente a nuevas infecciones una vez iniciado el tratamiento.



Los investigadores principales del estudio DART llevaron a cabo un análisis observacional de los participantes en dicho ensayo, de distribución aleatoria, sobre estrategias de manejo de la infección, con el fin de evaluar qué impacto tuvo la profilaxis con cotrimoxazol sobre las personas que comenzaron la TARV durante el estudio.



Los participantes (todos ellos con recuentos de CD4 menores a 200 células/mm3) no empleaban cotrimoxazol de forma rutinaria, ni tampoco les fue asignado de forma aleatoria, sino que cada médico generalista en particular decidió el momento de comienzo e interrupción de su uso.



Los autores decidieron determinar el efecto del empleo de cotrimoxazol [después de comenzar la TARV] sobre factores como la supervivencia, la aparición de acontecimiento de las etapas 3 ó 4 de la infección (según el criterio de la OMS), la malaria, el recuento de células CD4, el índice de masa corporal (IMC) y los marcadores sanguíneos.



El análisis contó con 3.179 participantes procedentes de cuatro centros (dos clínicas en Uganda: el Consejo de Investigación Médica/Unidad de Investigación sobre el Sida de Uganda en Entebbe y el Centro del Programa Conjunto de Investigación Clínica, en Kampala, con una clínica satélite en el Instituto de Enfermedades Infecciosas en Mulago y otra instalación en Zimbabue: la Universidad de Zimbabue en Harare) que permitieron disponer de un total de 14.214 persona-años de seguimiento; en el 57% (ó 8.128 persona-años) se empleó cotrimoxazol.



El uso de este antibiótico varió entre los cuatro centros (15%, 72%, 72% y 79%, respectivamente).



El nivel de adhesión al tratamiento antirretroviral fue elevado tanto en el caso de los pacientes que tomaban cotrimoxazol en ese momento como en los que lo habían utilizado.



El estar empleando este antibiótico redujo la tasa de mortalidad en un 50% en las primeras doce semanas, con independencia del centro, si la profilaxis comenzó antes o al mismo tiempo que la TARV. Los autores subrayan que los beneficios en términos de supervivencia se limitan al uso en ese momento.



No resultó sorprendente comprobar que los factores vinculados con una mayor tasa de mortalidad incluyeron tener un recuento de células CD4, una concentración de hemoglobina o un índice de masa corporal bajos, ni que la tasa fuera también alta entre los que presentaron un acontecimiento de las etapas 3 ó 4 de la infección (según la clasificación de la OMS) en las 4 semanas precedentes, o cualquier acontecimiento de las etapas 3 ó 4 desde el momento de realizarse la distribución aleatoria. Estos mismos factores estuvieron relacionados también con una mayor probabilidad de uso de cotrimoxazol.



Sin embargo, los beneficios en el empleo de este antibiótico disminuyeron con el tiempo de duración del tratamiento antirretroviral, pasando de una reducción del 58% en el riesgo de fallecimiento durante las primeras cuatro semanas bajo TARV al 5% en las semanas 68 a 72. Tras este momento, no se observaron más reducciones.



Los autores plantean diversas posibles explicaciones del motivo por el que los beneficios de la profilaxis parecieron ser mayores en las primeras 72 semanas de tratamiento antirretroviral que después de ese período.



Una posibilidad podría ser que el uso de cotrimoxazol ya no ofrece ningún beneficio adicional una vez se ha alcanzado un determinado nivel de CD4, lo que indicaría que el sistema inmunitario es más fuerte.



De hecho, el equipo de investigadores no encontró ninguna relación entre el recuento de CD4 y la magnitud del efecto de cotrimoxazol: Los pacientes con recuentos bajos de CD4 después de 72 semanas no fueron más propensos a morir debido a infecciones que podrían prevenirse con este antibiótico que las personas con recuentos de células CD4 elevados.



Otra posible explicación es que, aunque el empleo de cotrimoxazol no aumenta el recuento de CD4, puede disminuir la gravedad de las infecciones y, por tanto, reducir el riesgo de muerte. Pese a todo, esto no explica por qué su efecto se desvanece después de 72 semanas.



Los autores sugieren la hipótesis de que la administración de cotrimoxazol reduce la cantidad de bacterias en el intestino y limita el movimiento bacteriano hacia el torrente sanguíneo, disminuyendo así la activación inmunitaria y mejorando la respuesta inmunitaria. Sin embargo, el mecanismo a través del cual una disminución de la activación inmunitaria puede conducir a una reducción de la susceptibilidad a enfermedades potencialmente mortales queda sin explicación, y no es posible estudiar más a fondo dicha relación en esta población debido a la ausencia de una cantidad adecuada de muestras.



El uso de cotriomoxazol no tuvo efecto sobre la aparición de nuevos acontecimientos de la etapa 4 de la infección (según la clasificación de la OMS), los recuento de CD4 o el índice de masa corporal. Tampoco tuvo ningún efecto sobre la incidencia de tuberculosis.



No obstante, la incidencia de malaria se redujo en un 26%. En Uganda, donde esta enfermedad es endémica, el efecto antipalúdico se mantuvo con su utilización más allá de las 72 semanas. Los investigadores señalan que estos resultados concuerdan con otros informes referentes a los beneficios de cotrimoxazol contra la malaria en los adultos semiinmunes.



En este contexto, ‘semiinmune’ se refiere a las personas nacidas y que viven en una zona endémica de malaria, en comparación con las consideradas como ‘no inmunes’, aquéllas que no han crecido en dichas zonas. La malaria no resulta mortal para los adultos con semiinmunidad y el uso de cotrimoxazol no constituye la opción de tratamiento preferida.



Los autores reconocen el valor que tienen los ensayos de distribución aleatoria para garantizar la obtención de las mejores pruebas para su empleo en el tratamiento del paciente. Sin embargo -agregan-, el manejo eficaz de la infección tiene que darse con o sin estos datos. Su estudio- señalan-, fue observacional, por lo que no puede descartarse la existencia de un sesgo.



No obstante, los datos provienen de un ensayo de distribución aleatoria donde los hallazgos clínicos y de laboratorio clave empleados por los médicos para el manejo de los pacientes fueron reunidos de manera sistemática y prospectiva. El gran tamaño de la cohorte, junto con la coherencia de los resultados en los cuatro centros añadió fuerza a sus hallazgos, indican los investigadores.



Éstos proponen que, dado que las características de los participantes en el ensayo DART son similares a las de la mayoría de los pacientes que inician la terapia antirretroviral en el África subsahariana, sus resultados deberían poder generalizarse.



Los autores concluyen que "los beneficios en términos de mortalidad, seguridad y tolerabilidad, junto con el bajo precio y la simplicidad de implementación, sugieren que la profilaxis con cotrimoxazol resulta rentable y tiene un efecto notable sobre la salud pública. Nuestros resultados refuerzan las directrices de la OMS y ofrecen una fuerte motivación al menos durante 72 semanas a todos los adultos que comienzan la TARV en África".



Referencia:
AS Walker, et al. Daily co-trimoxazole prophylaxis in severely immunosuppressed HIV-infected adults in Africa started on combination antiretroviral therapy: an observational analysis of the DART cohort. The Lancet, online edition, DOI:10.1016/S0140-6736(10)60057-8, March 29, 2010

martes, 20 de abril de 2010

Presentación de un nuevo informe de HSH realizado en Lagos, Nigeria por NHVMAS.

Resumen General

La Sociedad para la abogacía de una nueva vacuna contra el VIH y microbicidas  (NHVMAS) presentó un nuevo informe sobre HSH.

Un entrenamiento de 5 días para HSH se llevó a cabo  en Lagos, Nigeria  para la prevención del VIH, tratamientos e investigaciones. A pesar de haber sido  organizado para 25 participantes, finalmente se alcanzaron los 28 participantes que asistieron a los 5 días de entrenamiento.

Antes del entrenamiento, una reunión organizativa  se llevó a cabo el 19 de marzo de 2010 entre miembros de IRMA y NVHMAS, en la que fueron seleccionados los participantes, se escogió el lugar y se ultimaron detalles junto a los facilitadores.

 Hasta la última semana se mantuvieron las comunicaciones vía correo electrónico y telefónicas entre miembros de NHVMAS, NARN, NACA y el Consejo Demográfico.

Se utilizó el boceto del manual de entrenamiento para HSH de Naca. El entrenamiento sirvió como prueba piloto para el manual de entrenamiento final.

Las lecciones aprendidas en el entrenamiento servirán en el proceso de revisión.

Al final del entrenamiento los pre y post análisis de la prueba  demostraron una notable mejoría en el conocimiento y comprensión del VIH como un todo entre los participantes del entrenamiento. Lo más importante es que la gente tomó conciencia de la importancia del uso constante y correcto de los preservativos.

Las lecciones aprendidas incluyen:

1.      Enfocados en HSH el entrenamiento debería hacer énfasis en el correcto y constante uso de preservativos. Los HSH siempre tendrán diferentes parejas sexuales por diversas razones.

2.       El uso de pares como entrenadores hace una gran diferencia. Estos son capaces de crear empatía con ellos y compartir sus propias experiencias de vida con los participantes. Esto ayuda a crear un ambiente interactivo en el cual resulta mucho más fácil aprender.

3.       Este entrenamiento tuvo muy pocas lecciones didácticas. El hecho de tener el feedback con pares permite una interacción mayor y se transmite el conocimiento desde todas las vías, permitiéndoles a los participantes verse a futuro como posibles guías de estos grupos.

4.       La colaboración es posible y enriquece los programas.  La colaboración entre NHVMAS e Irma ayudó en alcanzar personas a las cuales NHVMAS nunca habría podido llegar. La Colaboración con NARN y con el Consejo de Población también aseguró que el entrenamiento no terminará allí. Los participantes serán absorbidos por el Consejo de Población y por el programa de entrenamiento educativo para HSH de NARN en un futuro cercano.
 Para obtener más información y ver el informe en inglés siga el siguiente enlace: 

lunes, 19 de abril de 2010

Quinta Conferencia Mundial de Microbicidas 2010 Construyendo puentes hacia la prevención del VIH.





Del 22 al 25 de mayo se llevará a cabo en los Estados Unidos, en la ciudad de Pittsburgh, la quinta conferencia mundial de Microbicidas, donde se presentarán los últimos avances alcanzados para la prevención del VIH, simposios multidisciplinarios acerca de Microbicidas y otros métodos de prevención, charlas y conferencias.





El tema de la Conferencia, Construyendo Puentes hacia la prevención del VIH, fue desarrollado con la intención de aumentar la colaboración entre científicos de diversas áreas y crear nexos de colaboración entre todos los actores que participan de forma activa con la defensa y divulgación de los Microbicidas como prevención del VIH.

Para obtener más información acerca de la Conferencia, visita 


http://www.microbicides2010.org/

viernes, 16 de abril de 2010

Conoce a Javier, un amigable defensor de los Microbicidas Rectales

Nacido en México DF, México, Javier Arellano ha tomado con muchísima fuerza la abogacía de los Microbicidas Rectales.

En su labor como  Director Adjunto de Prevención Clínica del programa contra el SIDA en Ciudad de México  se introdujo al mundo de los Microbicidas Rectales cuando asistía a la Conferencia Internacional del SIDA 2008 realizada en México.

 “Estoy convencido de  que los Microbicidas Rectales serán una de las alternativas futuras para prevenir las ITS, incluyendo el VIH. Yo creo que los microbicidas serán una herramienta complementaria en la lucha del VIH”

Desde que Javier se involucró con Irma, ha continuado su investigación en la salud sexual de HSH, abogando por los microbicidas rectales en sus presentaciones y cursos.

Es también uno de los colaboradores del blog Life Lube  “How are you healthy” (cómo te mantienes sano?), una de las secciones más populares de este blog de salud para hombres gays.


Lee más acerca de Javier y otros amigables defensores de Microbicidas Rectales en inglés en el siguiente enlace:
http://www.rectalmicrobicides.org/advocates.php

miércoles, 14 de abril de 2010

La carga viral en las primeras fases de la infección por VIH puede predecirse sabiendo la de la pareja que transmitió el virus

La carga viral en personas recientemente infectadas por el VIH está muy relacionada con la de la persona que les transmitió el virus, según informa un equipo de investigadores de EE UU en la edición digital de AIDS.

“Encontramos una sólida correlación entre los niveles de ARN del VIH tipo 1 [VIH-1] en los miembros fuente y receptor de las parejas en la transmisión de dicho virus”, comentan los autores.

El estudio también arrojó luz sobre los factores que contribuyen al mantenimiento de la epidemia de VIH. Cabe destacar que cerca de dos terceras partes de los pacientes fuente que transmitieron el virus se habían infectado ellos mismos de forma reciente.

La carga viral en las primeras fases de la infección por VIH se ha identificado como un factor importante en la progresión de la misma, y las personas con cargas virales más elevadas en ese momento presentan un peor pronóstico en su conjunto.

Los estudios que examinaron los factores que afectan a la carga viral durante la primoinfección han tendido a centrarse en las características del paciente huésped. Sin embargo, un equipo de investigadores del Proyecto Opciones [Options Project], de la Universidad de California en San Francisco (EE UU), decidió analizar la importancia de las características virales.

En consecuencia, los autores decidieron determinar la relación entre la carga viral en el miembro fuente de la pareja y el miembro receptor de ésta dentro de pares de transmisión identificados.

El estudio contó con 24 personas que mostraban indicios de una infección por VIH reciente.

Estos pacientes ofrecieron información sobre las personas que pensaban que les habían transmitido el virus. Con su consentimiento, los investigadores contactaron con ellas y, tras aceptar formar parte del estudio, fueron sometidas a diversos análisis de sangre y proporcionaron detalles acerca de su historial de realización de pruebas y tratamiento del VIH.

En el ensayo se identificaron e incluyeron 23 personas fuente (una de ellas transmitió el VIH a dos parejas). Los 47 participantes del estudio eran hombres gays.

Se empleó el análisis filogenético para confirmar la relación entre el virus de la persona fuente y el de aquélla a la que se lo transmitió.

Las personas recién infectadas tenían un recuento mediano de CD4 de 528 células/mm3 y una carga viral mediana de 86.332 copias/mL.

La media en el recuento de CD4 en las personas fuente fue de 372 células/mm3 y la media de la carga viral, de 23.951 copias/mL.

Hay que señalar que las características virales de nueve de los pacientes que transmitieron el virus sugerían que ellos mismos también habían sido infectados hacia poco por VIH. Este hallazgo se suma a las pruebas obtenidas en otros estudios, que indicaban que las personas recién infectadas (y en consecuencia, por lo general, no diagnosticadas) tienen una importancia clave en la continuidad de la epidemia.

Cuatro de los pacientes fuente tenían experiencia en el uso de terapia antirretroviral. Uno la había interrumpido tras tres meses, y otro había abandonado el tratamiento poco antes de la visita del estudio. Ninguno presentaba una carga viral indetectable, que osciló entre 6.776 y 137.000 copias/mL.

El análisis evidenció que las cargas virales en los miembros fuente y receptor de la pareja estuvieron estrechamente correlacionadas (p= 0,009).

La carga viral de la pareja recién infectada aumentó en 0,43log10 por cada incremento de 1log10 en la viremia de la persona transmisora del VIH.

El equipo de investigadores, asimismo, llevó a cabo un análisis para comprobar si esta relación se mantenía con el tiempo. Lo restringieron a aquellos participantes que adquirieron el virus y que no hubieran empezado la terapia anti-VIH.

Los autores descubrieron una correlación significativa entre la carga viral del miembro fuente y receptor de la pareja a lo largo de 48 semanas (p= 0,042).
Cuando se realizó el ajuste para tener en cuenta posibles factores de confusión como edad, etnia y otras características virales, se comprobó que los resultados no se vieron afectados.

“En resumen, nuestras observaciones sugieren la existencia de una fuerte influencia de los factores genéticos virales sobre los niveles de ARN del VIH-1 durante la fase de primoinfección”, afirman los responsables del estudio.

Y por último, añaden: “Es preciso efectuar más estudios para identificar mejor las características genéticas virales relacionadas con unos mayores o menores niveles de ARN del VIH-1, y para comprender más a fondo las respuestas inmunitarias del huésped que afectan a la replicación viral a lo largo del tiempo”.

Referencia:
Hecht FM, et al. HIV RNA level in early infection is predicted by viral load in the transmission source. AIDS 24 (online edition), 2010.

Más Información en español:

A partir del 4 de enero del 2010, el VIH ya no es considerado “una enfermedad contagiosa importante para la salud pública” En las solicitudes migratorias de los Estados Unidos.

Por más de 15 años, los Estados Unidos tuvo una de las políticas inmigratorias más restrictivas en el mundo hacia los extranjeros con VIH — no se les permitía entrar a los Estados Unidos como viajeros a corto plazo u obtener la Green Card a menos de que fuesen elegibles para una dispensa (perdón) especial que era muy difícil de obtener.

En julio del 2008, el Congreso aprobó una ley que elimina la prohibición inmigratoria por VIH. En noviembre del 2009, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) publicó regulaciones finales removiendo VIH de la lista de enfermedades contagiosas, por esa razón a partir del 4 de enero del 2010, ser VIH seropositivo ya no es relevante para solicitudes Inmigratorias. HHS también enmendó sus reglas para el examen médico requerido para la tarjeta verde, y la prueba de VIH ya no es requerido como parte del proceso de solicitud para la Green Card.

Más Información en español:

Tasas de nuevos diagnósticos de VIH entre hombres gays de EE UU, 44 veces superior a las observadas en otras poblaciones

El VIH tiene un impacto enormemente desproporcionado sobre los gays y otros hombres que practican sexo con hombres [HSH] en el país norteamericano, según las nuevas cifras hechas públicas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU (CDC, en sus siglas en inglés).

Un equipo de investigadores de los CDC comprobó que la tasa de nuevas infecciones por VIH entre los hombres gays y bisexuales era 44 veces superior a la apreciada en otras poblaciones de varones y unas 40 veces mayor que la de las mujeres.

Las cifras analizadas de forma reciente también evidenciaron que las tasas de diagnósticos de sífilis son hasta 71 veces mayores entre los hombres gays y bisexuales que en otras poblaciones.

"Está claro que no seremos capaces de detener la epidemia de VIH en EE UU hasta que cada comunidad afectada, al igual que las autoridades sanitarias de todo el mundo, den prioridad a las necesidades de los hombres gays y bisexuales en sus esfuerzos para prevenir el virus", comentó el doctor Kevin Fenton, de los CDC.

Los hombres homosexuales representan el 48% del millón de infecciones por VIH existentes en el país norteamericano. El único grupo en el que están aumentando los nuevos diagnósticos de VIH es en el compuesto por los hombres que practican sexo con hombres, que en 2006 supuso el 53% de los casos de VIH del país.

Los datos de los CDC presentados en la edición de 2010 de la Conferencia Nacional Para la Prevención de ETS [Enfermedades de transmisión sexual] mostraron que se produjeron entre 522 y 989 nuevos diagnósticos de VIH al año por cada 100.000 hombres gays y bisexuales, frente a 12 por cada 100.000 entre otras poblaciones de hombres y 13 por cada 100.000 en el caso de las mujeres.

Esto significó que la tasa de nuevos diagnósticos de VIH fue hasta 44 veces superior entre los hombres gays y bisexuales que en otros grupos de población.

El cálculo de las tasas de sífilis resultó estar entre 91 y 73 casos por cada 100.000 personas al año en el caso de hombres gays y bisexuales, unas 46 veces superior a la cifra de 2 por cada 100.000 observada en otros hombres y 71 veces mayor a la de 1 por cada 100.000 en el caso de las mujeres.

Los datos de los CDC también demostraron el impacto desigual que tiene el VIH sobre las diferentes poblaciones de hombres gays y bisexuales.

El mayor número de nuevas infecciones por VIH entre hombres gays en 2006 se dio en hombres de etnia blanca (13.230), seguida de cerca por los hombres gays de etnia negra (10.130). Entre los varones blancos gays, la mayoría de las nuevas infecciones se produjeron entre los treintañeros (4.670), seguidos por los que tenían edades comprendidas entre 40 y 49 años (3.740).En el caso de los hombres de etnia negra, se advirtió un perfil de edades diferente. Las nuevas infecciones se concentraron de forma desproporcionada entre los que tenían entre 13 y 29 años (5.200).

El equipo de investigadores descubrió que la prevalencia de VIH entre los hombres gays de algunos centros urbanos llegó a cifras tan elevadas como el 25%. Además, aproximadamente el 50% de los varones no eran conscientes de tener el VIH, cifra que aumentó hasta casi el 80% entre algunas poblaciones de hombres gays jóvenes.

Los CDC creen que el aumento del VIH entre los hombres gays se debe a una compleja interacción entre diversos factores.

El más destacado de ellos es la alta prevalencia del virus entre varones homosexuales. Esto significa que cada encuentro sexual aumenta el riesgo de exposición al VIH. Los autores, asimismo, consideran que el hecho de que los hombres jóvenes gays de etnia negra se emparejen con otros hombres de la misma etnia de mayor edad (entre los cuales la prevalencia del VIH es alta) también puede conducir a un mayor riesgo de infección.

Por otra parte, se estima que el elevado número de infecciones no diagnosticadas entre los hombres gays contribuye del mismo modo a la propagación continua del VIH.
Igualmente, se sugirió el sentimiento de autocomplacencia como posible explicación. Los CDC apuntan que se trata sobre todo del caso de los hombres gays jóvenes que no "experimentaron en persona la gravedad que tuvo el inicio de la epidemia de sida".

Sin embargo, este razonamiento no permite explicar el gran número de nuevas infecciones por VIH que se producen entre los hombres de edades comprendidas entre 30 y 50 años.

Según los CDC, los avances en el tratamiento del VIH han provocado que algunos hombres gays hayan desarrollado la "falsa creencia" de que "el virus ya no representa un problema de salud grave".

Otro factor que se sugirió que podía tener influencia es la dificultad para mantener durante toda la vida las prácticas de sexo seguro.

La homofobia, además de otras formas de discriminación (que pueden impedir que los hombres accedan a los servicios de atención médica y prevención), también se encuentra entre los motivos que, según los CDC, están impulsando la propagación del VIH entre hombres gays, al igual que los elevados niveles de consumo de drogas.

"El riesgo de transmisión del VIH por la práctica del sexo anal receptivo es mucho mayor que el riesgo de transmisión por otras actividades sexuales, y algunos hombres gays y bisexuales confían en estrategias de prevención que pueden ser menos eficaces que el uso constante del preservativo", indican los CDC.

Estos centros, asimismo, destacan que es probable que muchas infecciones por sífilis en hombres gays tengan lugar por la práctica de sexo oral.

"No existe una solución única o simple para reducir las tasas de VIH y sífilis entre hombres gays y bisexuales", afirmó Fenton. Y agregó: "Tenemos que intensificar unos esfuerzos de prevención tan diversos como la propia comunidad gay. Resulta especialmente crítico encontrar soluciones para los hombres gays y bisexuales jóvenes, de modo que el VIH no se convierta, de manera involuntaria, en un rito de transición para cada nueva generación de hombres gays".


Más información en español:


Microbicidas y Prevención del HIV Lecciones del pasado mirando hacia el futuro

Autor: Morris GC, Lacey CJ

Referencia: Curr Opin Infect Dis. 01 February 2010;23(1):57?63.
http://journals.lww.com/co-infectiousdiseases/Abstract/2010/02000/Microbicides_and_HIV_prevention__lessons_from_the.11.aspx

Resumen de la Publicación:


Objetivo de la revisión:

Esta revisión provee una actualización en el desarrollo de la investigación de microbicidas HIV, en el reciente lanzamiento de los resultados de eficacia en la Fase 3, y cómo las lecciones aprendidas de las primeras generaciones de microbicidas pueden ayudar al desarrollo de futuros agentes.


Conclusiones recientes:

Los resultados de un análisis interino de las pruebas de la Fase 3 sugieren que el sulfato de celulosa incrementa el riesgo de infección de VIH comparada con el placebo. Carraguard, SAVVY y Buffergel, no pudieron demostrar ninguna protección frente al VIH en las pruebas de eficacia humana. Investigaciones recientes se han enfocado en aclarar los motivos tras estas fallas así como mejorar las expectativas de seguridad y eficacia para los candidatos a la nueva generación de Microbicidas. El gel PRO2000 0.5% es el único de los microbicidas que sugiere en los primeros informes una posible eficacia en mujeres. Agentes antirretrovirales e inhibidores de entrada pueden proporcionar la clave en el futuro para el desarrollo de un microbicida VIH eficaz tanto para el empleo vaginal como rectal.


Sumario:

El desarrollo de una barrera protectora que pueda ser controlado por el receptor sexual, independientemente del momento en que ocurra el coito es el objetivo clave en la prevención contra el VIH. La presentación combinada en gel y anillo de un agente anti VIH efectivo puede probar ser más efectivo que la utilización individual de uno de estos. Los desafíos en la evaluación y elaboración de nuevos candidatos deben ser vencidos antes de que un microbicida tolerado, eficaz, económico y aceptable pueda ser producido.


Más información en inglés en:





Por qué las duchas anales podrían ser una vía efectiva para los microbicidas rectales entre hombres que tienen sexo con hombres?

Autores: Carballo-Dieguez A, Bauermeister J, Ventuneac, et Al
Referencia: Enfermedades de Transmisión Sexual 01 de abril de 2010; 37(4):228-233
http://journals.lww.com/stdjournal/Abstract/2010/04000/Why_Rectal_Douches_May_Be_Acceptable.6.aspx

Resumen de la Publicación:

Fundamento Teórico:
Explorar la edad de inicio de duchas rectales entre hombres que tienen el sexo con hombres (HSH) y motivos que inducen y mantienen el hábito de las duchas y considerar si las duchas rectales con agentes microbicidas podrían ser aceptables para hombres en situación de riesgo frente al HIV.



Métodos:
En la fase 1, utilizamos métodos cuantitativos para explorar el comportamiento de las duchas en una muestra de 20 HSH. Subsecuentemente, desarrollamos y estructuramos un cuestionario que fue implementado en la fase 2 a 105 HSH.



Resultados:
Más de la mitad de los participantes que completaron el paso 1 utilizaron la ducha durante la prueba a pesar de haber sido informados de no hacerlo. De los 105 participantes HIV negativos en la fase 2, 51% admitieron el uso de duchas rectales en los últimos 6 meses; 47% antes y 25% después de tener sexo anal. La mayoría de los participantes admitieron el uso frecuente o habitual de las duchas. En general, los hombres admitieron utilizar la ducha con 2 horas de antelación o 1 hora posterior al sexo. La media de edad de los participantes estaba entre los 25 y los 30 años. La mayoría de los participantes utilizaban la ducha por razones higiénicas, o por petición de sus parejas. Algunos de los participantes pensaba que la ducha anal posterior al sexo podría prevenir también la transmisión de ITS.



Conclusión:
Las duchas rectales parecen ser un hábito frecuente entre hombres receptivos en el sexo anal. Replantear esta conducta existente a la que muchos hombres están habituados, utilizando otro tipo de ducha parece más viable que la introducción de métodos nunca practicados anteriormente o de aquellos a los que se resisten (por ejemplo el uso de condones)



Más información en inglés en:
http://journals.lww.com/stdjournal/Abstract/2010/04000/Why_Rectal_Douches_May_Be_Acceptable.6.aspx

Perú: Pacientes HIV positivos “élite” fomentan esfuerzos de investigación para una vacuna.

En la lucha global contra el SIDA, un nuevo frente al sur ha comenzado en Perú. En Lima, su capital, una investigación internacional está tomando forma. Juan Carlos Hurado, médico especializado en el tratamiento de pacientes HIV positivos estudia a un paciente perfectamente sano, a pesar de ser portador. El paciente, ha solicitado ser llamado sólo por su nombre, Hans. En ocho años desde su diagnóstico inicial, Hans nunca ha estado enfermo y tampoco ha tomado medicinas.




PACIENTE (HANS): Me siento normal, como cualquier persona, y vivo de la forma más normal posible




RAY SUAREZ: La habilidad especial de permanecer sano sin tomar medicamentos de Hans lo ha colocado en una clase muy especial de pacientes HIV positivos llamado por los investigadores “Controladores élite” Este grupo selecto tiene la habilidad de controlar el virus del HIV suprimiéndolo. En el Perú han sido identificados 600 pacientes llamados élite, en quienes las infecciones no han requerido un tratamiento de SIDA de por vida. Los científicos están observando a estos pacientes con la finalidad de entender el por qué. El doctor Bruce Walker, del Instituto Ragon en Boston está liderando la investigación Elite en conjunto con el MIT, Harvard y el Hospital General de Massachusetts.




DR. BRUCE WALKER, Instituto Ragon: Estas personas no tienen efectos adversos por la infección que puedan ser identificados. Ellos están – ellos se sienten perfectamente sanos. No necesitan medicación, Su conteo de CD4 (que sirve para medir las funciones inmunológicas) indica que su función inmunológica es normal. Y a día de hoy sabemos que algunas de estas personas han vivido infectadas por más de 30 años y están sanos.




RAY SUAREZ: Walker espera que algunas pistas saldrán a la luz al estudiar a los pacientes élites, y que esto nos llevará, finalmente, a encontrar una vacuna contra el VIH




DR. BRUCE WALKER: Si tuviesemos una vacuna capaz de controlar los niveles del VIH tan bajos como en estas personas, Podríamos tener la esperanza de que su capacidad de transmitirle el virus a otra persona, así como la progresión de cualquier otra enfermedad sería menor. Y eso básicamente revertiría la epidemia, si logramos hacerlo.




Por tanto, nuestro objetivo al estudiar a estos pacientes “élite” es encontrar cómo lograron convertir en algo irrelevante el VIH y la capacidad de controlar ellos mismos la enfermedad. Estamos convencidos de que la solución que tanto buscamos para controlar la epidemia del VIH yace en estas personas..




Más información en inglés en: