Desde su creación en 2005, los Activistas Internacionales por un Microbicida Rectal (IRMA) han tenido un crecimiento y un éxito significativo. A partir de un número de miembros que podía contarse con los dedos de una mano, IRMA ha construido una red de más de 500 activistas, investigadores y personas que redactan las políticas en más de 40 paises de los 5 continentes.

El objetivo de IRMA-ALC es trabajar en conjunto con IRMA, pero con el propósito específico de difundir información sobre los Microbicidas Rectales en nuestra parte del mundo, y, siempre que sea posible, en castellano y en otros idiomas regionales.

jueves, 18 de agosto de 2011

Más datos procedentes del estudio iPrEx sobre profilaxis preexposición

El estudio iPreX OLE analizará la eficacia a largo plazo y el comportamiento de las personas sin VIH que toman de forma prolongada tratamiento antirretroviral para evitar la infección.



En la VI Conferencia sobre Patogénesis, Tratamiento y Prevención del VIH, celebrada recientemente en Roma (Italia), se presentaron los últimos datos procedentes del ensayo iPrEx, en el que se probó el uso de una combinación de tenofovir y emtricitabina (TDF/FTC, Truvada®) como régimen de profilaxis preexposición (PPrE).
Este estudio constituyó la primera prueba de la eficacia de esta estrategia preventiva en la población de hombres que practican sexo con otros hombres (HSH) y mujeres transexuales. Por su parte, los estudios Partners PrEP y TDF2 han aumentado el alcance del descubrimiento, demostrando la eficacia de la profilaxis preexposición también en la población masculina y femenina heterosexual.
En el iPrEx se distribuyó de forma aleatoria a 2.499 hombres y mujeres transexuales (es decir, todos los participantes habían nacido de sexo masculino) que practicaban sexo con hombres para recibir TDF/FTC o placebo una vez al día.
Los nuevos análisis incluyeron datos del ensayo recopilados hasta agosto de 2010, o sea, cuatro meses después de la fecha de corte del estudio ya publicado, y arrojaron los siguientes resultados:
•    El análisis por intención de tratamiento (ITT), en el que se tuvieron en cuenta todas las infecciones por VIH producidas a lo largo del período de seguimiento, mostró que los participantes que recibieron la profilaxis presentaron un riesgo de infección un 45% menor que los que tomaban placebo.
•    El análisis por intención de tratamiento modificada (mITT), en el que se excluyeron los participantes que ya mostraban niveles de ARN del VIH detectable en el momento de la inscripción en el estudio, demostró que la profilaxis con TDF/FTC redujo el riesgo de infección en un 42% respecto al placebo.
 
Además de actualizar los datos de eficacia general, también se compararon los resultados de la prevención en diversos subgrupos de participantes. Así, las personas que tomaron TDF/FTC con una regularidad suficiente como para presentar unos niveles detectables de fármaco en sangre tuvieron un riesgo un 92% menor de infección por VIH.
Se llevó a cabo un estudio tipo caso-control, en el que fueron comparados 48 participantes que se infectaron por VIH frente a 144 controles que no (en todos los casos, estas personas recibían TDF/FTC y no un placebo). Los controles fueron emparejados con los casos en función de la localización geográfica y el tiempo en el ensayo. Un análisis en el que se consideraron posibles factores de confusión reveló que, con respecto a los participantes que se infectaron, los pacientes control que no adquirieron el VIH tendían a presentar una mayor concentración de TDF en células (36% frente a 9%) y en plasma (40% frente a 8%), de FTC en células (41% frente a 11%) y en plasma (40% frente a 8%), o a tener un nivel detectable de cualquier fármaco (44% frente a 10%).
 
Por otro lado, no se encontraron pruebas de virus con resistencia a TDF o FTC en las personas que se infectaron durante el ensayo. Asimismo, la carga viral de los participantes que se infectaron no varió entre los que tomaban Truvada® y los que recibían placebo.
Estos dos factores (la ausencia de resistencia y las elevadas cargas virales en las personas a las que se administró TDF/FTC) resultan indicativos de que estos voluntarios mantuvieron un bajo grado de adhesión al régimen diario.
 
La eficacia protectora de la PPrE fue significativamente superior entre los 1.485 participantes que habían afirmado mantener relaciones anales receptivas en el momento de iniciarse el estudio que entre los que no (59% frente a 25%; p= 0,04).
Por otro parte, también se comprobó que la eficacia protectora de la profilaxis preexposición fue más elevada en los 332 participantes circuncidados cuando comenzó el iPrEx que entre los no circuncidados (83% frente a 36%), aunque esta diferencia no tuvo relevancia estadística (p= 0,10).
Se observó que la protección ofrecida por TDF/FTC no dependió del origen étnico, el consumo de alcohol, el nivel educativo o la edad.
 
Sin embargo, el análisis ha puesto de manifiesto que el uso de la PPrE no resultó tan eficaz en la prevención del virus entre la pequeña proporción de mujeres transexuales. Entre los 366 participantes (15%) que se declararon transexuales o que empleaban hormonas sexuales femeninas (casi ninguna de estas personas se había sometido a un cambio de sexo), tuvieron lugar 11 infecciones por VIH en el grupo de TDF/FTC y 11 en el de placebo. El equipo de investigadores planteó la hipótesis de que las diferencias en la eficacia de la PPrE entre los participantes transexuales y el resto podrían explicarse por el azar o por variaciones en los patrones de toma de los comprimidos, las prácticas sexuales o los efectos de las hormonas sobre el transporte de fármacos en la mucosa.
 
Los autores concluyeron que “la administración oral de FTC/TDF proporciona una protección adicional frente a la adquisición del VIH entre HSH que reciben un paquete integral de servicios preventivos”, y destacaron que dicha protección llegó al 92% en el caso de los hombres que tomaron TDF/FTC de forma regular, determinada mediante la detección de niveles detectables de TDF y/o FTC en sangre y células. El equipo del iPrEx señaló que la protección se situó entre el 90 y 100% en algunas sedes del ensayo.
Asimismo, se ha anunciado que se prevé llevar a cabo una ampliación del ensayo iPrEx (que se denominará iPrEx OLE) en el que todos los participantes tomarán TDF/FTC durante un período de 72 semanas, sin brazo de placebo.
Al igual que en el iPrEx, los voluntarios del iPrEx OLE recibirán un paquete integral de prevención del VIH, que incluirá la realización regular de pruebas, la distribución de preservativos, servicios de counselling, y el diagnóstico y tratamiento de las infecciones de transmisión sexual.
Aparte de recopilar datos relativos a la eficacia y seguridad a largo plazo de la PPrE, también ofrecerá información adicional sobre si los participantes usarán la profilaxis de forma más constante ahora que los beneficios preventivos han quedado demostrados y que las personas saben que están recibiendo los fármacos activos y no un placebo.
Ya ha comenzado la inscripción en EE UU y Sudáfrica, mientras que las sedes de otros países están pendientes de la aprobación normativa antes de proceder a la misma. No obstante, se espera que todas estén completamente operativas en agosto de 2011.
Se añadirá una sede adicional en Chicago (EE UU) a las que ya participaron en el estudio original.